Misión, Visión y Valores

La Fundación Ábaco para el Progreso de la Educación trabaja para cumplir sus objetivos en dos planos diferenciados.
En la Fundación Ábaco para el Progreso de la Educación se trabaja para que los padres, profesores y alumnos puedan ejercer sus derechos en el ámbito educativo reconocidos en el artículo 27 de la Constitución Española, prestando apoyo a iniciativas del ámbito de la enseñanza pública, privada y concertada.
Asegurar la efectividad del derecho de los padres a elegir la educación que desean para sus hijos, en libertad.
Se trata de un derecho fundamental y que nos ampara a todos: padres de la enseñanza pública y privada, concertada y no concertada.

La educación es un derecho que debe ser garantizado por las autoridades y que exige una oferta escolar plural. Cuanto más variadas sean las escuelas, más se perfecciona el derecho a elegir.

Los centros públicos y los privados son complementarios: constituyen el medio necesario para satisfacer ese derecho, de acuerdo con las opciones libres de los padres.

Las actuaciones en defensa de la libertad educativa se articulan en tres ámbitos:

Pedagógico
Fondo de documentación, publicaciones de interés didáctico especializadas y de divulgación, organización de congresos o seminarios, etc.
Jurídico-legal
Fundamentación jurídica de ese derecho, sostenimiento de recursos legales para su defensa, etc.
Comunicación
Crear una opinión pública respetuosa con esos valores.
Promover la creación de centros o apoyar a instituciones educativas concretas para mejorar la calidad de las enseñanzas que imparten y facilitar el acceso a éstas.
Nuestra colaboración con centros educativos concretos tiene como objetivo prioritario asegurar su continuidad en el tiempo. Por ello, los convenios que se realicen irán encaminados, en primer lugar y si fuera necesario, a posibilitar el sostenimiento de estos centros, sin que deban renunciar para ello a su propia identidad.

Este apoyo dará una atención preferente a las labores dedicadas a la promoción de la infancia y del mundo rural, y, en general, a las zonas geográficas más deprimidas desde el punto de vista educativo.

Pretendemos que todas las familias que se sientan identificadas con el ideario de estos centros puedan acceder a ellos en condiciones de igualdad, por lo que se debe dotar a los centros con un fondo de becas para quienes carezcan de suficientes recursos económicos.